El 22 de febrero es el Día Europeo de la Igualdad Salarial, una fecha clave para reflexionar sobre la importancia de eliminar las diferencias salariales en el ámbito laboral. Con la aprobación del Real Decreto 902/2020, las empresas se enfrentan al reto y la oportunidad de liderar en igualdad de trato y no discriminación salarial, pero su implementación requiere de acciones concretas que detallamos a continuación:

Principio de transparencia retributiva

El núcleo del RD 902/2020 es el principio de transparencia retributiva que busca eliminar la opacidad en los salarios y asegurar que todos los puestos de trabajo de igual valor reciban una remuneración equivalente, sin discriminaciones. Para implementar este principio, las empresas tienen a su disposición distintos instrumentos:

  1. Registro retributivo y valoración de puestos de trabajo: obligatorio para todas las empresas, este registro debe incluir el nivel medio de salarios, los complementos y las percepciones extrasalariales, desglosados por sexo entre otros. Se debe realizar una valoración de todos los puestos de la empresa, estableciendo criterios objetivos y equitativos que reflejen el verdadero valor de cada puesto sin sesgos de género u otros tipos de discriminación.
  2. Auditoría retributiva: es obligatoria para empresas de más de 50 personas o las que sin llegar a este número realicen un Plan de Igualdad o empresas obligadas por convenio colectivo, o por exigencia de la Autoridad Laboral. Se realiza una auditoría salarial que debe corregir las desigualdades que se identifiquen.
  3. Derecho de información de las personas trabajadoras según lo establecido en el Estatuto de los trabajadores.

Cómo reducir la brecha salarial

Aunque comúnmente se asocia con diferencias entre hombres y mujeres, la brecha salarial también puede afectar según la edad, raza, discapacidad, orientación sexual y nivel educativo. Para reducirla, además de cumplir con la normativa, es fundamental abordarla de manera proactiva y:

  • Establecer políticas de igualdad de género efectivas.
  • Promover soluciones que permitan una mejor conciliación laboral y familiar.
  • Fomentar un ambiente de trabajo inclusivo, libre de discriminaciones donde se realizan contrataciones o promociones más justas basadas en la meritocracia.
  • Implantar planes de igualdad de oportunidades de mujeres y hombres.

 

En ISB Consultoría, ayudamos a las empresas a implementar estas políticas y cumplir no solo con la legislación vigente sino para asesorarte en cada paso hacia este objetivo esencial. Invitamos a todas las organizaciones a revisar sus políticas salariales y prácticas de empleo. La igualdad salarial no es solo una obligación legal, es el camino hacia una sociedad más justa.